12 de octubre de 2010

CAPITULO 18 - Una sorpresa más

Pasaron unos días hasta que llegó otra vez el fin de semana, cada vez nos llevábamos mejor con Naryssa, sobre todo Sergio con el que había conectado tan bien, que hasta ya eran novios y estaban los dos mejor que nunca. Y los demás pues cada uno a su rollo.
- Hija, come algo y deja un ratito a las musarañas anda.
- ¿E? A lo siento.-y me metí a la boca un trozo de croissant.
- ¿Hoy vas a hacer algo?
- Tenía pensado quedar con los de siempre.
- Pues les dices que te tienes que ir al aeropuerto.
- ¿Al aeropuerto?-pregunté extrañada.
- Sí, si vas, sabrás quien viene.
- A vale. ¿A que hora aterriza el avión?
- A las 14:30.
- Gracias mamá, me iré un rato con esta gente e iré al aeropuerto.
- Vale.
Llamé a Jessica para quedar, ella llamaría a los demás.
Me vestí con unos piratas y una camisa de media manga ya que hoy estaba el cielo un poco nublado. Me maquillé ligeramente y me hice una coleta alta.
- Mamá me voy.-dije mientras la daba un beso.
- Adiós hija.
Añoraba a mi padre ya que por el trabajo se movía mucho y estaba muy poco en casa.
Recordar a mi padre resultó que me desanimé y llegué a la playa a paso muy lento.
- Hola-dijeron todos a la vez.
- Hola…
- ¿Qué te pasa?- me preguntó Sergio.
- Nada, no es nada grave.
- ¿Segura?
- Si, sí.
- Vale- dijo mientras me dio un beso en la mejilla.
- Bueno… ¿qué pensáis hacer hoy?
- Yo tengo que ir al aeropuerto a recoger a alguien a las 14:30. Quien quiera me puede acompañar.
- Vale eso lo vemos luego. ¿Vamos a tomar algo a la heladería?
- Vale- dijimos todos al unísono.
Tardamos unos 20 minutos en llegar, era la misma a la que fui con Joe hace un tiempo.
Cojimos una mesa de las más grandes y nos sentamos.
Tomamos una carta cada uno para ver que tomábamos y rápidamente vino la camarera y nos tomó nota.
- Hola, buenos, ¿qué deseaban tomar?
- Pues 3 batidos de chocolate, 2 de fresa, 1 de vainilla, un cono de nata y una tarrina de chocolate con dos bolas y sirope por encima, por favor.-pidió Sergio.
No tardó mucho en traernos nuestro pedido y nos lo bebimos mientras hablábamos.
- Bueno entonces quedamos en ir al parque de atracciones mañana, ¿no?
- Si. –dijimos Allison y yo al unísono.
- Bueno yo me voy yendo que entre que llego y no al aeropuerto… ¿Alguien me acompaña?
- Yo y creo que Allison- me dijo Joe.
- Vale. Pues nos vamos chicos. Adiós.
Nos fuimos a la parada del autobús más cercana y 10 minutos después ya íbamos camino del aeropuerto a recibir a una o varias personas a las que ni siquiera sabía si les conocía.
Cuando llegamos al aeropuerto fuimos donde me indicó mi madre por la mañana, el vuelo venía desde España, pero a saber quien era.
- ¿A quién esperas exactamente?- me preguntó Allison.
- No lo sé ni yo.
- Estamos apañados.
- Pone que aterriza en 5 minutos, no hay que esperar mucho para ver quien es, pero cuando lleguen aquí, entre que salen las maletas y no nos da la media hora seguro.-dije.
Esperamos la media hora mas larga de nuestras vidas.
Empezó a salir gente por la puerta no conocía a nadie. Pero al fondo se veían a dos personas que me resultaban algo familiares.
- ¡SAMUEL!-grité lo más que pude y me lancé a abrazarle.
Le echaba mucho en falta ya que en España era al que le contaba todo.
- Tatiana- y la abracé también.- ¿Qué hacéis aquí?
- Un pequeño respiro con los estudios, jaja, y por si no lo sabías estamos saliendo juntos.
- Me alegro por vosotros- dije mientras sonreía.
- Bueno, veo que no me has echado mucho en falta.
- No sabes cuanto, bueno te presento.
Hice las presentaciones y cuando acabamos cogimos un autobús de vuelta a casa.
- Bueno mañana si queréis os podéis venir al parque de atracciones, estáis invitados.- les ofreció Joe.
- Gracias, iremos si nos deja Silvia.
- Pues claro que os dejo tontos.
Joe y Allison se bajaron en las paradas que mejor les pillaba, ya que yo era la quemas lejos vivía.
- Bueno nos tienes que contar mucho.
Le conté como me iba todo en Los Angeles y cuando llegamos a casa otra vez llegaron los abrazos.
- Mamá, ¿por qué no me habías dicho nada?
- Era una sorpresa.
- Eres malvada.
- Jajaja, solo cuando quiero. Voy a calentar la cena.
Cuando acabamos preparamos sus camas y todos nos fuimos a dormir ya que al día siguiente íbamos al parque de atracciones.

2 comentarios:

  1. ¡Hola! Escribes muy bien y la historia está bastante interesante. ¡Síguela pronto! ^^

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  2. olaaa, siento n contestar pero n sabia q tenias capis nuevo o nm di cuenta en el tuentiii, me encanta cm sigues voy a leert los demas, besitos wapaa

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